Una acción fraccionaria es una acción normal dividida en varias partes. Hay varias razones y objetivos para tal división, y uno de ellos es dar a los pequeños inversores la oportunidad de comprar una acción de la empresa, aportando así más dinero a la empresa.
Ventajas de las acciones fraccionarias
Ofrecen a los principiantes la oportunidad de dominar la inversión con un capital pequeño y sin apalancamiento.
Los inversores aprenden a gestionar el dinero con mínimos riesgos. Un principiante tiene la oportunidad de componer su portafolio de inversiones con activos de diferentes sectores y esferas de la economía, y equilibrar el precio de las acciones según el volumen de las posiciones que abre.
Los riesgos están diversificados, lo que significa que no invierte todo su dinero en una compañía.
Puede invertir una cantidad equitativa de capital en instrumentos diferentes. Puede distribuir la misma proporción de su capital en el ámbito que le interese independientemente del precio de las acciones; en otras palabras, puede comprar partes de acciones por la misma suma, independientemente de su precio de mercado.
Recibirá dividendos y recompensas de la misma manera que con las acciones normales. Usted siempre obtiene una suma proporcional de dividendos a las acciones que posea, y las acciones fraccionarias no son una excepción. Aunque puede haber excepciones cuando la fracción de la acción es menor que la unidad monetaria mínima (un centavo o un kopeck).